Yucatán_Mayaland
Be Maya en Mayaland.

A unos pasos de Chichen Itzá, está el hotel Mayaland, hasta donde fuimos para pasar un día interesantísimo porque además de visitar la zona arqueológica, pudimos aprender mucho más de los mayas gracias a su programa “Be Maya”.


Qué hacer en Chichen Itzá


“Be Maya” es una actividad totalmente familiar que ofrece el hotel Mayaland, el único que se encuentra a un costado de la Chichen Itzá, casi dentro de la zona arqueológica.

Su duración es de varias horas y da comienzo con el recibimiento en el lobby del Mayaland, donde se pueden ver las fotos del lugar y hacer un breve recorrido a través de ellas de su historia y las personalidades que se ha hospedad ahí.

Luego da inició la sesión en sí, con una clase de numerología maya, para la que sinceramente resulté muy mala. Una chala y un video que nos permitieron comprender mejor algunos datos, lugares y signos.

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Be Maya en Mayaland.
El día continúo con una ceremonia de un chaman y luego tuvimos una clase de cocina en los jardines del hotel. Preparamos el delicioso pollo al pibil, desde el inicio. Conocimos sus ingredientes, su origen y finalmente pusimos manos a la obra para enchilarlo, colocarlo en la olla y después ponerlos en el hoyo bajo la tierra, lo que le da el nombre de pibil.

Continuamos el recorrido hasta una sala donde se puede ver un video tiempo planetario con duración de 30 minutos que resume perfectamente y a detalle el inmenso valor histórico del lugar que estábamos a punto de visitar. Aún cuando no tomes el programa “Be Maya” sí te recomiendo entrar a ver está película, realmente vale la pena.

Seguimos con una visita a la zona arqueológica de aproximadamente dos horas, a la que fuimos caminando porque cómo les cuento, el hotel está justo a un lado y tiene una entrada exclusiva para sus huéspedes.

La lluvia amenazaba ese día de verano, pero nos dejó terminar para regresar al hotel y comer precisamente lo que habíamos preparad horas antes: pollo al pibil.

Si bien toma casi todo el día la actividad, vale la pena sobre todo si se viaja con niños, pues es una forma interactiva de conocer más allá que las pirámides.

El hotel es ideal para disfrutar plenamente de Chichen Itzá, y cuenta con hermosas áreas verdes, restaurante, albercas y mucho más.

Cómo dato curioso, ahí se hospedó Luciano Pavarotti en 1997 cuando fue a dar aquél histórico concierto en Chicen Itzá, al que se dice que asistieron más de 17 mil personas. 


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