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Mezquita en Aqaba, Jordania. |
Luego de recorrer algunas ciudades de Jordania, como Amán, me queda claro que Aqaba es una de sus zonas más relajadas en cuanto a tradiciones se refiere. A este destino de playa a orillas del Mar Rojo, llegan los turistas nacionales y extranjeros que buscan calidad en servicios y buena ubicación para disfrutar de los atractivos que el sur del paÃs ofrece.
Hotel Kempinski Aqaba
Aqaba es reconocida porque cuenta con hoteles de lujo, playa y la posibilidad de realizar deportes acuáticos como el snorkel, el buceo y el muy de moda windsurfing; pero también es una ciudad moderna donde no se ve tanta gente con el atuendo tradicional jordano, como ocurre en otros lugares del paÃs.
Una mañana recorrà gran parte de su centro y descubrà lo maravilloso de su mercado, donde se pueden conseguir un sinfÃn de especies y frutos secos; pero también hay muchas tiendas con ropa, calzado, joyerÃa, juguetes y otros objetos más.
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Atardecer en Aqaba. |
Por otra parte, muy pegado a la zona hotelera, están las tiendas de mayor calidad, boutiques y artesanÃas del paÃs y de otras regiones; además de servicios turÃsticos, como recorridos, renta de autos, cafeterÃas y restaurantes; en uno de ellos comà y pronto me di cuenta que no es del todo bien visto que una mujer sola entre a un restaurante. Asà que devoré rápido el menú que incluÃa una porción abundante de vegetales con pollo y un refresco, que costó 6 dinares (unos 130 pesos), y salà del lugar. Cabe mencionarles que TODOS los negocios en Jordania son atendidos por hombres, asà que no fue nada cómodo que dos chidos murmurarán a mis espaldas mientras comÃa, pero es parte de la experiencia.
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Costo de comida. |
El calor era tremendo y luego de caminar un poco fui al hotel a hacer check in. Llegué a The Kempinski en Aqaba y fue como entrar en el paraÃso, es un hermoso lugar a la orilla del mar.
Recordé mi agradable paso por el Hotel The Kempinski en Praga y con eso supe que esta experiencia en Aqaba debÃa ser muy similar.
The Kempinski en Aqaba es un hotel grande y con un diseño espectacular, alberca al aire libre, playa con arena blanca y 5 restaurantes, de los que sólo conocà uno durante el fabuloso desayuno bufete, de los más completos que he tenido en mi vida en un hotel; además de que todo estaba delicioso, presentan platillos jordanos y también de cocina internacional.
Las habitaciones tienen grandiosa iluminación natural gracias al ventanal y la ubicación y forma del edificio, que es ovalada y permite ver tanto la salida como la puesta del Sol desde el balcón de las habitaciones.
Tiene amplios espacios comunes, un lobby minimalista y lleno de luz también. El servicio es de lo mejor y su spa, aunque no es muy grande, si cuenta con buena propuesta de terapias corporales y faciales.
Me contaron en el hotel, que los visitantes gustan de llegar a Aqaba y desde ahà hacer muchas excursiones de un solo dÃa, como a Petra y otros atractivos reconocidos del paÃs. Y claro que también los turistas llegan ahà en busca de playa, buen clima y deliciosos servicios.
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The Kempinski en Aqaba, notel el traje de baño de la mujer de naranja. |