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La Dolce Vita, en Guadalajara.

Para nadie es un secreto que la oferta gastronómica de Guadalajara es excelente y en mi más reciente visita a esa ciudad capital del estado de Jalisco (México) tuve la gran experiencia de comer en La Dolce Vita, donde me reencontré con el rico aroma y sabor de la cocina italiana. 


Dónde comer en Guadalajara


Una tarde con buen clima pese a que estábamos casi en invierno, llegamos al restaurante La Dolce Vita ubicado en la misma calle del hotel donde nos hospedamos (Villa Ganz), en la López Cotilla. La bienvenida no se hizo esperar, pasamos a la mesa desde donde se puede ver la calle, con una caída de agua al lado y en seguida se hizo sentir el buen servicio del lugar, pusieron sobre la mesa el canasto de pan con hierbas finas, doradito, aromático... perfecto! y confieso que me lo terminé; luego, pedimos un prosecco para acompañar la comida del día y pocos minutos después llegó el carpaccio de dorado con ensalada de camarones y demás mariscos, arúgula y zanahoria, que habíamos pedido. Sin duda, un gran comienzo!! 

Después, una pasta a los tres fungí y prosciutto, una delicia que bien recuerdo ahora y ya me saboreo. Todo en el menú se antoja realmente, lo difícil es elegir y una vez comenzando sólo se trata de dejarse llevar por el gusto. 

Por su parte, mi hija pidió su siempre favorita pasta a la bolognesa, de la cual atinó a decir que estaba “¡muuuuy buena!”. 

Magnífica charla, bonito lugar, gran atención y la tarde quedó coronada con mi postre italiano consentido: tiramisú. Después, llegó el café y así concluyó una comida más que recomendable y me llegó la intención de regresar, porque de ese tipo de comidas ustedes saben que me gusta repetir. 


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La Dolce Vita.